CONSULTA realizada por Luis jueves, junio 14, 2012
Hola, soy un estudiante de 20 años. Desde hace un mes aproximadamente, coincidiendo con el aumento de horas de estudio, me pican mucho los ojos, se me cansa la vista, me molesta la luz, y necesito parpadear constantemente. Ademas, tengo los ojos muy rojos. Hoy he visitado una optica y me han hecho una revisión. Me han dicho que tengo hipermetropía (0,5 en cada ojo) y un poco de astigmatismo. Mis preguntas son dos: ¿necesito ponerme gafas? y en ese caso... ¿es conveniente que me viera un oftalmólogo para hacerme más estudio (me han hablado allí de dilatar pupila, ver fondo de ojo...) o con los datos que me han dado en la optica sería suficiente? Agradezco de antemano su respuesta. Luis.
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Hola Luis
Espero que el esfuerzo de los exámenes haya merecido la pena.
Me parece correcta la actitud que has tomado; primero te has acercado a una óptica donde se ha realizado una exploración básica y al detectar una pequeña hipermetropía (+0.5) te han recomendado una evaluación oftalmológica, en la que además se completará el resto de la exploración.
Seguramente el conjunto de síntomas que nos describes podría caber bajo una denominación: la ASTENOPIA, también conocida como fatiga visual, que tiene un origen multifactorial. Trataremos de ver alguno de los factores que influyen, sobre todo los más frecuentes.
- Ametropía: es el principal factor a tener en cuenta. Denominamos así a un trastorno refractivo, o sea, a la necesidad de usar corrección óptica, ya sea en gafas o lentillas. La presencia de hipermetropía o astigmatismo son las más frecuentes causantes de las molestias y para ellas suele ser suficiente un estudio básico, aunque en el caso de la hipermetropía en pacientes jóvenes, se requiere dejar el cristalino en reposo para eliminar la capacidad de acomodación (“poner gotas”, usamos colirios ciclopléjicos para ello) técnica que se realiza en las consultas de oftalmología y que no es accesible a las ópticas. Busca en tus familiares más cercanos porque existe un componente genético, y si ellos han necesitado usar gafas, tú tendrás más posibilidades de requerirlas.
- Forias: ligeros trastornos en la motilidad ocular y en la convergencia provocan un sobreesfuerzo para mantener la fijación, y con ella también puede aparecer la astenopía. De esta forma, personas con una cierta tendencia a que sus ojos estén “hacia adentro” (endoforia) o “hacia fuera” (exoforia) consumen continuamente energía para mantenerlos alineados y con el paso del tiempo acaban por aparecer molestias o disconfort visual.
- Iluminación: las horas de estudio las solemos asociar con la luz artificial, y esta siempre obliga a un mayor esfuerzo que la natural, para la que están diseñadas las estructuras oculares. Las bombillas de filamento incandescente y las lámparas halógenas son las más adecuadas por no tener fluctuaciones. Una iluminación escasa o en exceso, con sombras o reflejos, puede ocasionar de la misma forma molestias visuales. Una simple recomendación es que la luz entre desde la izquierda en los diestros y al revés en los zurdos.
- Cansancio: cuando hacemos deporte nos cansamos, cuando trabajamos nos cansamos, cuando estudiamos… también nos cansamos, lógicamente, cuanto mayor es el esfuerzo al que se somete cualquier órgano, mayores son las molestias. Aún sin la presencia de otras alteraciones, es recomendable hacer pequeños descansos en las situaciones de máximo requerimiento.
- Estrés y tensión: influyen de la misma forma que en el resto del organismo, aumentando las exigencias y provocando mayor cansancio. Cualquier actividad que aumente la tensión provoca una disminución del parpadeo y con esta, molestias oculares de tipo quemazón, sequedad, cuerpo extraño…
Para acabar, una curiosidad: ¿te has fijado que los niños cuando tienen sueño se frotan los ojos, que cuando no dormimos lo suficiente los tenemos rojos o tenemos ojeras? Hay pues muchas situaciones que reflejan el estado general del organismo y no indican patología ocular alguna, mostrando simplemente la sensibilidad de esos órganos a mínimos cambios.
Un saludo
Antonio Espejo González
Médico Especialista en Oftalmología. Jefe de Sección de Oftalmología.
Médico Especialista en Oftalmología. Jefe de Sección de Oftalmología.
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